CONTRA EL EDADISMO
Leonardo Da Vinci estuvo pintando La Gioconda hasta los 67 años
Aunque destacó durante toda su vida en varios campos distintos, y demostró su gran sabiduría, no dejó de trabajar y crear hasta su muerte a los 67 años.

Publicidad
Nació en Florencia el 15 de abril de 1452, como Leonardo di ser Piero da Vinci y dominó varios campos desde la ciencia al arte, destacó por sus ingeniosos inventos, su visión urbanista y como pintor siendo uno de sus cuadros más famosos la Gioconda. No obstante, fue un polímata que dominó la arquitectura, la anatomía, la escultura, la botánica, entre otros gremios. Fue un auténtico genio y es el símbolo del hombre renacentista.
Aunque su madre era una campesina, su padre era de familia adinerada, y aunque no fue reconocido como hijo legítimo si lo cuidaron y lo trataron como uno más de la familia. Pronto empezó a mostrar sus habilidades artísticas y muy joven entró a formar parte del taller de Verrocchio. Fue en este taller de Florencia donde empezó a aprender varias disciplinas no solo pintura. Con veinte años ya había superado a su maestro por lo que se convirtió en un pintor independiente.
Pocos años después fue enviado para trabajar para Ludovico Sforza, un mecenas donde demostró sus dotes como ingeniero, investigó formas de mejorar sistemas hidráulicos y de defensa. No obstante no abandonó sus dotes artísticas, ya que entre los años 1494 y 1498 pinto uno de sus cuadros más conocidos, La última cena. Con la caída de los Sforza (1499), Leonardo quedó al servicio del conde de Ligny. Leonardo trabajó como arquitecto e ingeniero militar para los venecianos que querían construir protecciones en su ciudad.
En 1504 volvería a Milán y fue en esta época ya con 67 años donde comenzaría a trabajar en su obra más famosa, La Gioconda (1503) también conocida como Monna Lisa, se considera un retrato de Lisa Gherardini, una noble florentina. No obstante no terminaría el cuadro hasta casi su fallecimiento en 1519.
Leonardo murió el 2 de mayo de 1519, en Amboise Francia, donde residía desde 1516 y con un nuevo mecenas el rey de Francia, Francisco I. Legó el conjunto de sus obras para que fueran publicadas por su discípulo preferido, Francesco Melzi, este administró su herencia durante cincuenta años. Sin embargo, no publicó nada de las obras de Leonardo ni vendió ninguna de las numerosas pinturas, como por ejemplo La Gioconda. Sin embargo, a raíz de la muerte del artista inevitablemente su legado comenzó a perderse, y aunque se ha conservado una buena parte, durante estos siglos se han perdido muchos de los documentos que redacto Leonardo.
Publicidad