VIDA SANA
El ejercicio físico con el que podrás vivir más, según la OMS
El ejercicio físico es tan importante que, además de ser beneficioso para la salud física y la longevidad, también puede tener un impacto en la salud mental.
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Todos los expertos coinciden en la importancia del deporte para mantener una vida sana. Si bien elementos como tener una dieta equilibrada o no caer en consumos como el tabaco o el alcohol son importantes, sin el ejercicio físico es indispensable.
Y no solo tiene un impacto en la salud del cuerpo y en la esperanza de vida, sino que incluso puede llegar a tener un impacto directo en la salud mental y en la prevención de enfermedades crónicas.
Tanto es así, que la OMS ha afirmado que para que una persona mayor se pueda mantener sana tanto física como mentalmente, ha de realizar entre 150 y 300 minutos de ejercicio físico a la semana. De esta manera se podrá sacar máximo rendimiento a estas actividades y, por lo tanto, mejorar nuestra salud.
Estas cifras podrían traducirse como 25 minutos paseo a ritmo constante todos los días, algo que si se combina con tareas que hacemos todos los días, no es tan complicado de hacer. Este pequeño rato todos los días tendrá un gran impacto en la salud y en la longevidad. Además, de estas ventajas, la actividad física también puede mejorar el equilibrio funcional, así como la prevención de caídas, factores muy importantes en el día a día de las personas mayores.
Pero la realidad es que lo recomendable es complementar este tiempo dedicado al paseo con otros ejercicios variados, siempre estando enfocados al equilibrio y al entrenamiento de fuerza para mantener los músculos sanos.
De hecho, el ejercicio físico no solo beneficia a la salud muscular y mental, ya que también puede influir en la aparición de osteoporosis y artrosis, evitando su aparición. Por otro lado, los niveles de energía aumentarán, mientras que el estrés y la ansiedad perderán fuerza en la vida.
Esto mismo se puede comprobar con las personas que hacen justo lo contrario. Según la OMS, la falta de actividad física es un factor que puede desembocar en enfermedades cardiovasculares, cáncer o diabetes.
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